El funcionamiento de estos generadores eólicos es muy sencillo, sus aspas giran produciendo energía que es convertida a 220 volts por un inversor automático y almacenan energía en un set de baterías. Las baterías que manejan son de 12 volts y el amperaje definirá la cantidad de energía que se podrá tener almacenada para los días que no exista viento, cuanto mayor sea el amperaje de la batería, mayor tiempo de almacenamiento de energía tendrá.
Los generadores eólicos pequeños y medianos han evolucionado tecnológicamente y trabajan de manera independiente proveyendo energía a 220 volts de manera continua y con sistemas automáticos de autoprotección ante fuertes vientos. Estos sistemas automáticos fueron desarrollados especialmente para resistir los fuertes vientos de la Argentina por los emprendedores argentinos de Betep.
Para poder dimensionar cual es el generador eólico que se necesita se debe tener en cuenta el consumo de electricidad estimado y el lugar para conocer el viento de la zona.
Este aerogenerador fue instalado por Betep, empresa que se dedica a brindar soluciones inteligentes a problemas energéticos, comercializando entre otras cosas aerogeneradores. Es un emprendimiento que cuenta con el apoyo del Banco Credicoop, quien brindó el financiamiento para el desarrollo del mismo. Hoy el Banco Credicoop apoya a Betep no solo dándole un crédito para emprender sino que también financia sus productos a tasa 0% para quienes quieran adquirir sus productos.
Betep introduce una innovación en los generadores eólicos, esta innovación se trata de adaptar los sistemas electrónicos a los fuertes vientos de la Argentina. Los sistemas electrónicos fueron especialmente diseñados para entregar energía a 220 volts con un sistema de protección automática, esto significa que ante fuertes ráfagas de viento el equipo se protege desconectándose y evitando que se queme, luego pasada la ráfaga el sistema se conecta de manera automática, es decir no requiere la intervención del usuario.
Basf, especialista en pinturas de generadores eólicos europeos brindo el asesoramiento y facilito la pintura para realizar el pintado de la torre que produce Betep. Las pinturas de Basf están adaptadas para su máxima duración a la intemperie.
Las bases que sostienen a la estructura fueron ajustadas para resistir a los fuertes vientos y ráfagas de la Argentina. Las aspas necesitan contar con un tratamiento de protección especial para evitar el desgaste prematuro que generan las ráfagas en Argentina, tratamiento que también incorpora Betep.
En esta oportunidad se eligieron baterías Moura para el almacenaje de la energía producida por el generador eólico.
Esta es una solución ideal para dar energía a lugares donde aun no llega la energía y así revalorizar las tierras alejadas.
Esperemos que muchos más paradores y hogares de la costa Argentina consideren esta opción para obtener electricidad a partir del viento, un recurso que abunda en la costa Argentina.
Fuente: http://sustentator.com/
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