Pescarmona se convirtió en el mayor empresario eólico de Latinoamérica

Tiene 10 parques aerogeneradores instalados en Brasil y cinco en la Argentina. Y acaba de obtener financiamiento para concretar un nuevo proyecto en la Argentina.


Con la entrada en operaciones de su décimo parque eólico en Brasil –Amparo, en la región de Agua Doce, dentro del estado sureño de Santa Catarina–, la mendocina Impsa, conducida por Enrique Pescarmona, se convirtió formalmente en la mayor empresa del sector aerogenerador en Latinoamérica, por encima de gigantes como la danesa Vestas y las españolas Abengoa, Acciona e Iberdrola. 
Con una potencia instalada de 22,5 megawatts (MW), el flamante complejo se suma a otros nueve para totalizar una capacidad productiva de 222 MW. Se trata de unos 140 molinos que representaron una inversión final de 638 millones de dólares, suma desembolsada en asociación con el Fondo de Garantía de los Trabajadores de Brasil (FGTS). “La clave de nuestro crecimiento en el gigante del Mercosur reside en las facilidades brindadas por el Programa de Incentivo a las Fuentes Alternativas de Energía Eléctrica (Proinfa), además de que ese país cuenta con un mecanismo de financiamiento de obras de infraestructura bastante eficiente”, explicó Emilio Guiñazú, gerente general de Impsa Wind, en diálogo con El Inversor Energético & Minero.




A nivel local, la compañía está a cargo de otros cinco parques (cuatro en Santa Cruz y uno en La Rioja), además de haber ganado licitaciones en Chubut (Malaspina I y II) y tener un acuerdo firmado con Santiago del Estero. 
Por si fuera poco, en los últimos días se confirmó que recibirá financiamiento de la Corporación Andina de Fomento (CAF) y del Banco de Inversión y Comercio Exterior (BICE) para llevar a cabo la construcción de una central de generación eólica en la localidad de Koluel Kayke (Santa Cruz). Denominado Koluel Kayke II, el emprendimiento demandará un desembolso de u$s 81 millones, de los cuales 52 millones serán aportados por la CAF y el BICE mediante un préstamo a 10 años. Impsa Wind, por su parte, erogará los u$s 29 millones restantes.
Distinguida por la revista internacional de finanzas CampdenFB, en alianza con la consultora Ernst & Young, como la empresa familiar de mayor crecimiento del mundo, actualmente Impsa tiene en sus manos proyectos eólicos en construcción por 285 MW, en operación comercial por 322 MW, con acuerdos por compra-venta de energía con una capacidad de 535 MW y en distintas fases de desarrollo por 1.200 MW. 
Entre parques en marcha y en carpeta suma una capacidad de más de 1.800 MW en la región, por encima de los 1.300 MW de Vespas, los 1.000 MW de Acciona, los 300 MW de Abengoa y los 250 MW de Iberdrola.

Expansión en suelo charrúa

El crecimiento de la división eólica de Impsa en Latinoamérica no se limita a los mercados de Brasil y la Argentina, ya que también maneja proyectos atractivos en Perú y en Chile, y acaba de adjudicarse la instalación de un importante complejo de 50 MW en Uruguay. Según el contrato suscripto, durante los próximos 20 años la empresa del Grupo Pescarmona le venderá energía limpia al vecino país a u$s 63,5 por MWh.
“Esta obra nos representará una inversión cercana a los u$s 100 millones, monto necesario para la construcción y montaje de 34 generadores con una capacidad de 1,5 MW de potencia cada uno. Tenemos previsto conseguir parte de ese dinero mediante un crédito internacional e ir pagando el resto con lo que recaudemos por la venta de energía a la empresa estatal uruguaya UTE”, precisó Guiñazú. «


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