“Debido a la gran sequía que enfrentamos, el sistema está bastante ajustado. La presión sobre el sistema eléctrico durará, en principio, hasta el primer trimestre del año 2022”, advirtió Juan Carlos Olmedo, presidente del Consejo Directivo del Coordinador Eléctrico Nacional, tras ser citado por la Comisión de Minería y Energía de la Cámara de Diputados y Diputadas para disertar sobre este tema, a mediados de la semana pasada.
Allí el directivo solicitó a los actores del mercado a “hacer sus mayores esfuerzos por disponer de todo el combustible que sea necesario para la operación de sus unidades, en particular en base a carbón, gas y diésel”, teniendo en cuenta el problema que podría esperarse por delante.
En consecuencia, días después el Coordinador dio a conocer un documento en el que constan 11 proyectos de energía a los cuales se les solicita su entrada anticipada en funcionamiento para que puedan hacer su aporte frente a la escasez de energía.
Se trata de ocho proyectos eólicos, por 870,8 MW; dos térmicos, por 50 MW; y una mini hidroeléctrica de 11,4 MW (ver al pie).
Una fuente ligada al Coordinador confió que el ingreso anticipado de estos emprendimientos “dependerá finalmente de las gestiones que realicen sus dueños o titulares de los proyectos”.
Cabe señalar que, ante esta situación de escasez de energía, los precios se están disparando. Según la consultora Antuko, el jueves 12 de agosto pasado, por la noche, el valor llego a 309 dólares por MWh en Alto Jahuel, un récord que no se veía desde agosto del 2014.