La industria de la Información, la Comunicación y las Tecnologías (TIC) se está expandiendo rápidamente en la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN). El análisis explora cómo este rápido crecimiento está impulsando la demanda de electricidad, lo que genera preocupación por el aumento de las emisiones, ya que muchas redes eléctricas de la ASEAN siguen dependiendo de combustibles fósiles.
El informe muestra que seis importantes economías de la ASEAN (Indonesia, Malasia, Filipinas, Singapur, Tailandia y Vietnam) están surgiendo como puntos críticos de centros de datos globales, con 2,9 GW de nueva capacidad actualmente en desarrollo.
Malasia lidera el crecimiento
El lento ritmo de descarbonización del sector eléctrico amenaza aún más el progreso. Se proyecta que Malasia experimente el crecimiento más rápido en el consumo de electricidad de los centros de datos, con una demanda que aumentará de 9 TWh en 2024 a 68 TWh en 2030. Esto representaría el 30% del consumo eléctrico nacional y superaría el consumo eléctrico nacional total de Singapur en 2023.
Las emisiones resultantes de los centros de datos de Malasia podrían septuplicarse, alcanzando 40 MtCO2e para 2030, la cifra más alta de la región. Se proyecta que Filipinas experimente un aumento de hasta 14 veces en sus emisiones, mientras que las de Indonesia podrían cuadruplicarse.
“El crecimiento de los centros de datos está sobrecargando los sistemas eléctricos de la ASEAN, donde la mayor parte de la electricidad aún proviene del carbón y el gas. Ampliar las energías renovables y modernizar la infraestructura mediante inversiones proactivas y la colaboración regional es fundamental para garantizar un crecimiento sostenible e impulsar la transición energética”, dice Pritesh Swamy, director de Investigación y perspectivas de centros de datos para Asia Pacífico de Cushman & Wakefield.
“El auge de la industria de centros de datos de la ASEAN corre el riesgo de frustrar los objetivos de transición energética si no se toman medidas urgentes”, declaró Shabrina Nadhila, analista de energía de Ember. “Priorizar la energía solar y eólica, así como la eficiencia energética, con el apoyo de políticas sólidas, un marco nacional para centros de datos y la colaboración, ayudaría a garantizar que los centros de datos impulsen el crecimiento digital sostenible en lugar de aumentar la dependencia de los combustibles fósiles”.
Mientras que las grandes empresas tecnológicas dependen de los Acuerdos de Compra de Energía (PPA) para garantizar electricidad limpia, los operadores más pequeños necesitan un mejor acceso a opciones flexibles como los PPA virtuales y las tarifas verdes. Estas también pueden respaldar el almacenamiento, lo que ayuda a gestionar la variabilidad de las energías renovables.
La eficiencia energética también sigue siendo un factor clave. Integrar la eficiencia desde la fase de diseño y establecer directrices nacionales contribuiría a reducir el consumo de electricidad y a aliviar la presión sobre la red.
Fuente: El Periódico de la Energía
Publicar un comentario