Copenhague acabó muy por debajo de las expectativas

Tal como lo habíamos pronosticado en nuestro último newsletter, la Conferencia sobre el clima de Copenhague concluyó con un acuerdo de mínimos promovido por EE UU y China que aplazó los grandes objetivos y chocó con el desacuerdo de los países pobres. El acuerdo está muy por debajo de las expectativas generadas por un proceso de negociación que comenzó hace dos años en Bali (Indonesia).

Las promesas más concretas son las financieras: el texto prevé una ayuda inmediata de 30.000 millones de dólares en un periodo de tres años (2010-2012) para los países en desarrollo y una meta progresiva de 100.000 millones anuales a alcanzar en 2020, procedentes de fondos públicos y privados, bilaterales y multilaterales.

El documento reconoce también la necesidad de contener la elevación de la temperatura de la Tierra en 2ºC respecto a la era preindustrial. El documento no fija sin embargo plazos ni garantías de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero.

El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, admitió que el acuerdo "tal vez no sea todo lo que esperábamos, pero esta decisión de la conferencia de las partes es una etapa esencial" hacia la elaboración de un nuevo tratado internacional.

Publicar un comentario