Sin embargo, sólo tres meses después de esa decisión, Kicillof volvió sobre sus pasos y debido a la falta de estructura de Cammesa para absorber un universo de más de 2.500 Grandes Usuarios Menores (Gume), autorizará a las generadoras eléctricas a seguir a cargo de las cobranza de la venta de energía a las industrias.
El 14 de junio, la Secretaría de Energía publicó la Nota 3229, que estableció una serie de aspectos generales relativos al funcionamiento del nuevo esquema de contratos previsto por la resolución 95 de la cartera que dirige Daniel Cameron. La norma fijó los parámetros del nuevo mercado a término de energía, que pasará a ser controlado por el Estado a través de Cammesa. Pero ahora, frente a la dificultad administrativa y burocrática que implicará poner en marcha el sistema, el Gobierno moderó sus expectativas.
Por un tiempo, no será el Organismo Encargado del Despacho (OED) -que depende de Cammesa- el encargado de recaudar los pagos de las industrias, sino que la tarea seguirá bajo la órbita de los privados. Así lo dejaron entrever los funcionarios que negocian con las empresas la reestructuración del sistema de pagos y cobros por la venta de energía generada por centrales térmicas y represas hidroeléctricas.
En la práctica, ante la falta de recursos humanos y administrativos de Cammesa, el Ejecutivo optó por simplificar el sistema. En lugar de que el OED cobre la factura de los grandes usuarios y luego pague lo correspondiente a cada generadora, habilitará a las eléctricas a seguir cobrando la energía vendida a las industrias.
“Lo cobrado por las empresas será tomado como una acreencia y se descontará del total mensual que debe pagar Cammesa”, explicó a El Inversor Online un ejecutivo del sector, que encuentra entre sus principales jugadores a Endesa, Sadesa, Pampa Energía, AES y Albanesi.
Con todo, aún restan definir algunos detalles. Las empresas quieren que Cammesa les reconozca los costos administrativos que demandará el mantenimiento de su estructura de cobranza. Y también apuntan a que el Ejecutivo autorice un sistema de cortes para los usuarios que acumulen incumplimientos de pago. “Es necesario para poder efectivizar los cobros”, explicaron desde una generadora.
El sector ve con buenos ojos la cesión de la gestión de cobranza que, en rigor, no es más que continuar con la metodología anterior a la resolución 95 de Energía. Es lógico: prefieren repartir su facturación entre cientos de clientes que depender de los pagos de Cammesa como único acreedor.
Por el lado de las industrias, en la UIA preocupan algunos aspectos de la nota 3229, fundamentalmente en lo que tiene que ver con la implementación de una garantía de pago solidaria que deben aportar los GUME. Es que la norma establece que los usuarios tendrán que contribuir con un monto equivalente al 50% de la facturación media mensual, que podrá ser integrado en cinco cuotas mensuales.
Fuente: http://elinversoronline.com/
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